La coordinadora del área de Discapacidad, Natalia Rodríguez, se refirió al inicio de las obras para contar con un taller protegido, necesario para la inserción laboral de quienes tienen capacidades diferentes.

“La otra vez estuvimos en el lanzamiento y poniendo en conocimiento de la comunidad el bosquejo de lo que va a ser la obra, una vez finalizada. Ya las obras han comenzado, así que estamos muy contentos. Ya se ha iniciado lo que es cartelería y vallado, y emparejamiento del lote. Siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan, en 90 días podemos tener la obra concluida”, anticipa.

Lo cierto es que va a ser el primer taller protegido pinamarense, convirtiéndose en una realidad y superando los dichos de varias gestiones anteriores a la actual.

“La gran función que tiene un taller protegido es poder dar una vida un poco mejor desde lo social y económico, de contención, de trabajo a toda esa población que no está pudiendo ingresar al mercado competitivo laboral. Con esto decimos que las personas que no pueden acceder a un trabajo por su patología, o por cualquier motivo, lo van a poder hacer desde el taller. Van a poder producir ellos mismos, van a poder percibir dinero por esto, van a poder seguir cobrando su pensión y lo que es más importante es que van a poder estar dentro del sistema laboral”, señala.

La idea es elaborar productos que ingresen al mercado competitivo a través de un empresariado que se beneficie en alguna medida, que bien puede ser impositiva, y que sean permeables a la propuesta.

“La verdad es que venimos trabajando desde hace mucho tiempo. Este año se ha inaugurado el SAFI, un mecanismo con el cual pudimos determinar cuántos chicos, una vez concluido el secundario, se quedan sin hacer nada. Estamos hablado de una cantidad significativa de chicos y no tan chicos que están necesitando un lugar de pertenencia y poder hacer algo para ellos y la sociedad, sentirse útiles”, explica.

Natalia no oculta su alegría por el nuevo logro, que se suma al secundario existente. En realidad, lo que valora es que hay un cambio, otra mirada que moviliza.

Caber recordar que el área de Discapacidad fue creada por la actual administración, ello le permite a Natalia la satisfacción “de saber que cada día nos vamos a nuestra casa sabiendo que hemos podido hacer algo por el otro”.

El cambio se ha operado en las familias que han permitido visualizar a quienes tienen alguna limitación, logrando con ello conocer el universo del problema y obrar en consecuencia.