En busca del espacio perdido

Una nueva ordenanza apunta a evitar que el agua de lluvia que se acumula en los terrenos particulares se pierda. Por otro lado, se intentará recuperar parte del espacio público invadido por privados.

El secretario de Servicios Urbanos, ingeniero Javier Mendía, se refirió a una norma que apunta a ordenar el manejo del agua que resulta de las lluvias y la normalización del trazado que delimita el espacio público y el privado. En un primer paso, se propende a evitar la formación de acumulaciones de agua de lluvia y, en segundo término, regularizar la ocupación indebida de la vía pública, ya que se verifican zonas donde el privado ha invadido espacios.

“Se acaba de aprobar la nueva ordenanza respecto a los drenes pluviales, la infiltración de las aguas de lluvia; o sea, la idea es que el agua que cae en cada lote la absorba el mismo lote y no que se arroje a la vía pública. Ése es un aspecto que maneja la ordenanza, y el otro, igualmente importante, es que se establece que no se puede ocupar el espacio público más allá de la línea municipal con palos, ramas, durmientes, palmeras, canteros, etc. Como hay en muchos lotes de nuestra ciudad, esa ocupación indebida del espacio público hace que la calzada esté muy angosta porque la invasión a ambos lados lo impide”, detalló.

La nueva ordenanza establece 120 días para entrar en vigencia. Tiempo que será empleado para divulgar en los medios, las redes sociales y a través de un adjunto en las boletas de impuestos, que el plazo para la regularización de cada caso vence el 1 de marzo. Mendía dejó en claro que la idea no es salir a cobrar multas, ni mucho menos, sino fiscalizar. El alto funcionario aclaró que en algunos casos hay una merma de seguridad en las calles angostadas.

“En algunos lugares de espacios verdes se va con la motosierra y se corrige o corta las plantas que están invadiendo el espacio público en la ochava. Por ejemplo, ayer vino un juez al que le habíamos cortado el cerco vivo y le pareció mal. Es cierto que, normalmente, cuando hay parquero o propietario, trabajamos en conjunto pero tampoco es factible (más cuando hay una cuestión de seguridad) estar esperando… Hay una cuadrilla fija haciendo despeje de ochava que está dentro de las tareas habituales de la cuadrilla de espacios verdes. Todo lo que se pueda hacer consensuado, mucho mejor; ésa es la premisa y hasta ahora viene funcionando. Hay dos inspectores trabajando a full con este tema; incluso ayer tuvimos una reunión con Fiscalización para coordinarnos. En Cariló tenemos muy buena llegada a través de los parqueros, en el tema de las ramas, el embolsado, etc. Y cuando necesitamos comunicarnos con el propietario a veces hablamos con los parqueros y ellos nos dan el teléfono”, aseguró.

Una solución práctica para no derivar el agua hacia la calle se logra haciendo una depresión en el jardín, levantando el pasto, poniendo un poco de arena y volviendo a colocarlo, y la persona indicada para hacer esto es el parquero.

“Las situaciones más graves del agua hacia el espacio público pasan por esas rampas vehiculares o esos semicírculos que hacen. A veces esa rampa ya está en el espacio público y eso genera una gran cantidad de agua en el espacio público. La solución de esto es una rejilla interpuesta dentro de la rampa y esa rejilla colecta el agua y lo deriva hacia un pozo blanco, que son dos o tres, cuatro, aros de cemento agujereado y una tapa, y con eso resolvemos muchísimos problemas; incluso hay que tener en cuenta que ese pozo blanco no va a necesitar mantenimiento porque le estaríamos mandando agua limpia, así que es la solución ideal. Ya hay muchos que empezaron a hacerlo. Y lo mejor que podemos hacerle al acuífero es infiltrar el agua lo más limpia posible”, razonó el ingeniero.