Matías Melia profundiza su análisis y juega con un contrasentido: por un lado, los aumentos son momentáneos pero, por tratarse de porcentajes, su aplicación hace que se perpetúen.

“Es un poco lo que venimos charlando con Marcela Uhrig y Carlos Conti de lo que es una tasa y, a veces, un aumento por inflación y un ajuste de la tasa. Lo que se aprobó el otro día en el Concejo va a quedar de forma permanente porque lo que están aumentando es el porcentaje que se cobra en Salud cuando se emite la tasa; no es un ajuste por inflación. En este caso se volvió a dar un aumento que, si uno toma como parámetro el 2017, vemos que se suma un 145% este año y que si sumamos con lo anterior nos da un 483% en la Tasa de Salud”, razona.

Melia trajo a colación lo que se paga por las guardias médicas en Madariaga, por encima de los valores que se manejan a nivel local. Al respecto comparó ambas administraciones y dejó en claro que la comuna madariaguense levanta la basura, recoge las ramas, y que todo lo hace con personal municipal, mientras que en Pinamar todos los servicios están tercerizados y que es imposible pagar lo que paga el partido vecino.

Por su parte, Uhrig reflexiona: “Lo que argumentan los funcionarios es que no alcanza el dinero que se recauda con la Tasa de Salud con la coparticipación que recibimos de la Provincia y con el recupero de las obras sociales. Ésas son las tres fuentes de recursos de nuestro hospital y la salud pública acá, en Pinamar, y la verdad es que no alcanza. Ante esta cuestión la solución que propone el gobierno es aumentar la tasa. Igual, con el aumento, que fue enorme, no alcanza y además es un área en crecimiento porque siempre van a hacer falta más camas, más aparatología. Hay más gente. Dentro de un año va a pasar lo mismo y el aumento de hoy no va a alcanzar. Entonces si seguimos con la misma lógica ¿tendríamos que ir al 50% en Salud? La solución es cambiar las estructuras y la forma como se administra”.

Lo cierto y concreto es que el presupuesto ya se aprobó por mayoría. Ahora sólo resta optimizar el cobro de las atenciones a quienes tienen obra social y ver la posibilidad de que sea la Provincia quien se haga cargo de la salud, tal cual le corresponde.