“Desde la secretaría de Seguridad creo que hemos tenido una buena temporada porque desde el principio hemos hablado de ciertas medidas de seguridad, de saturación, de presencia policial en determinados lugares públicos que estuvo controvertido en un momento pero que a su vez hubo muchos comerciantes que en ese momento estaban felicitándonos porque eso permitió que no hubiera disturbios en los lugares públicos, concretamente el 31 de diciembre. Es de recordar que los restaurantes y en los balnearios, a la noche, tienen eventos importantes y en la zona de Bunge y playa se generaban disturbios y este año no hubo nada de eso pero claro, la diferencia es que hubo presencia policial donde se saturó la zona de acceso a la playa y eso generó que no hubiera disturbios, la policía no tuvo que reprimir, no hizo nada, tuvo solamente presencia. Eso era el 31 de diciembre pero creo que fue una muestra de lo que terminó siendo la temporada en Pinamar, y creo que eso es muy positivo, primero porque cuando se hacen las cosas por primera vez no deja de ser ensayo y error, y creo que esta fue una de las cosas muy positivas, la presencia policial en lugares públicos emblemáticos por la concentración de jóvenes. También fue muy importante, en los lugares de comidas rápidas a la madrugada y al amanecer cuando se incrementaba la presencia de adolescentes”, asegura el funcionario.

Los preparativos para generar una estrategia de control comenzaron en diciembre con reuniones donde no solo participó la cúpula de Seguridad, el intendente y los propietarios de los boliches nocturnos para planificar la noche en Pinamar “y cuando eso se hace y se planifican las cosas los resultados generalmente son positivos”.

En una misma línea Ventoso agregó: “Los resultados están a la vista y deberían estar satisfechos, no se han producido ningún tipo de desmanes, daños o lesiones durante toda la temporada siendo que hubo una concurrencia de público por las circunstancias del contexto nacional, en Pinamar hubo una concurrencia histórica de gente, no hablo de calidad de consumo, pero yo nunca vi en enero y febrero la cantidad de gente que hubo en Pinamar”.