“Nos ponemos a disposición de la Justicia”

La expresión se relaciona con las acusaciones en relación a aportes de campaña inexistentes, a las sospechas que sobrevuelan la obra pública y a los comercios sin habilitación que funcionaron durante la última temporada.

El jefe de Gabinete municipal, Federico Panzieri se refirió a temas de actualidad, como el presupuesto, las denuncias por los negocios sin habilitación que funcionaron en temporada, las obras públicas y los cuestionamientos a los falsos aportantes de la campaña.

–Analizando el ejercicio de la función, pareciera que por momentos sos el secretario de Hacienda. ¿Esto es tan así?
–Fui secretario de Hacienda desde el 10 de diciembre de 2015 hasta septiembre de 2016. La Jefatura de Gabinete se llevó una de las funciones que tenía la Secretaría de Hacienda, que muchas veces por eso uno está en las noticias o está contando novedades que es la formulación del presupuesto, generalmente en una administración, cuando crece o se hace más compleja, la secretaría o quien administra las finanzas y junta el dinero no tiene las decisiones de gasto. Es un proceso sano separar el de decisión de gasto del de recaudación porque si gasta el que recauda se puede generar alguna complicación. En este caso, Hacienda me comunica cuánto tengo disponible para armar mi presupuesto y me puedo limitar a eso para tener una política seria y responsable para lograr el equilibrio de las cuentas fiscales en la Municipalidad.

–¿Sos quien maneja el flujo de dinero?
–Para la autorización de gastos, sí, pero para la autorización de pagos es el secretario de Hacienda. Si yo sé que no voy a poder pagar y autorizo gastos que no voy a poder pagar en un mes o un mes y medio hasta que se confeccione la compra y se haga un devengado y se haga la factura, claramente le voy a estar fallando al proveedor, y nosotros venimos trabajando una política de compromiso con quienes nos proveen porque sabemos que a la Municipalidad le han faltado insumos, le ha faltado la confianza, tanto del contribuyente como del proveedor, obviamente porque la había dañado, porque no pagaba, porque no llevaba los servicios a las calles y eso genera problemas.

–¿Cuál es la situación presupuestaria?
–Ya enviamos el nuevo presupuesto al Concejo Deliberante, el que se había presentado en octubre de 2017, con ajustes relacionados con la realidad económica que viene viviendo el país. Hemos tenido una devaluación muy fuerte. Las paritarias se habían firmado con cláusula gatillo. El Ejecutivo está totalmente convencido de que tiene que cumplir y acompañar en el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores de la Municipalidad. Sabemos que son un 99% de la fórmula de trabajo y el haber puesto en pie esta Municipalidad y obviamente lo hemos mandado con un ajuste del valor del módulo con un aumento del 17%. Nosotros a principio de año pedíamos un 23%; de esta manera, con el 17% sobre el 11 que ya se otorgó, estaríamos en un 28%, obviamente avisamos a las fuerzas políticas que proponían votar en la segunda mitad del año un aumento y no darlo al principio del año. Es que el aumento, cuando se vota tarde, generalmente tiene que ser más alto porque se desaprovecha el mayor momento de recaudación del año, que es cuando están las marcas, el espacio público realmente vale; en invierno nadie está y obviamente en ese momento no se le otorgó al Ejecutivo, como tampoco en las versiones anteriores del presupuesto donde luego de 3 ejercicios hemos tenido aumentos del módulo inferiores a la inflación por eficiencia y reducciones de gastos en combustible Todas erogaciones, en un montón de cosas que antes bajo la excusa de que no se podían controlar, que la Municipalidad era muy grande y se necesitaba para darle servicio al contribuyente se despilfarraba sin ningún tipo de control y no tenía ningún resultado el mayor gasto de combustible, de horas extras, sobre lo cual hoy tenemos control y el contribuyente tiene la tranquilidad que estamos controlando cada peso que ingresa a la Municipalidad, tanto en la prestación de servicio como en la ejecución de obras…

–¿Cómo analizan las denuncias por irregularidades en las obras públicas que se han concretado en este último tiempo?
–Nosotros nos ponemos a disposición de la Justicia para cualquier tipo de pruebas o de información adicional que requiera porque el cambio en la manera de gobernar también representa saber y hacer cumplir que nadie está por encima de los demás ante la ley y, por otro lado, con la tranquilidad de que todo se realiza de manera transparente, que los expedientes hablan por sí solos, que las obras se hacen, pueden tardar un poco más, pero comienzan y se terminan. Venimos de un Pinamar en que no había obras, de un Pinamar abandonado, que tenía falta de credibilidad, tanto desde lo financiero para conseguir el financiamiento de las obras como también en la conformación de los equipos y el desarrollo de la capacidad técnica para poder hacer un proyecto, presentarlo, pedir la plata y ejecutarlo, que no es menor, y muchas veces sigue siendo una dificultad, y uno siempre trata de ir mejorando, teniendo más y mejor equipo, para que tal vez no haya una demora en una obra porque no puede ir a fiscalizarla ese día, entonces la frené mientras estaba fiscalizando otra.

–Hace unos días han retomado los timbreos. ¿Cómo fue el intercambio con el vecino?
–Sí. Fue bueno y nos dan ganas de seguir adelante y obviamente hay que escuchar y entender que uno a veces está con una agenda de dar vuelta la ciudad, que esté más linda, pero que también tenemos una realidad económica nacional en la que estamos inmersos […] con una inflación elevada, que está yendo hacia una etapa de recesión, de ajuste económico, en el que obviamente uno se pone del lado del vecino y sabe que lo que tiene que hacer en este momento es escuchar y trabajar para que en el futuro a Pinamar le vaya mejor.

–Hay denuncias por los negocios que funcionaron sin habilitación en la temporada pasada. ¿Cómo ven este tema desde el gobierno?
–En este caso, reiterando que somos un grupo de vecinos que ha querido participar y tomar el desafío de trabajar en la administración de la ciudad en que vivimos, es un trabajo desgastante. En el caso de las denuncias que se han suscitado en la última semana, que involucraban a Sebastián Manrique, con quien he trabajado y a quien admiro profundamente, lo he conocido desde la campaña, si bien conozco a la familia desde chico, un chico profesional a quien agradezco por lo que trabajó, ha decidido dar un paso al costado. También como el doctor Pablo Zenón, que se ha ido el día viernes del equipo de Salud con transformaciones importantes, cada uno en sus áreas, las denuncias que recibió fueron siempre por el mismo sector de la oposición. Esto lleva un desgaste y la necesidad de ponerse a disposición de la Justicia y volver al ámbito privado estando tranquilo de lo que hizo, de la manera que actuó, y deja que la Justicia pueda avanzar y obviamente el gobierno continúa. Contamos con el apoyo de ellos y nosotros los contamos dentro de las personas con las que trabajamos para que Pinamar cada día salga adelante.

–¿Notás un endurecimiento de la oposición en las denuncias que se formulan?
–Son prácticas de la vieja política. No vamos a ser partícipes o quedarnos atrapados dentro de esa lógica. Somos un equipo que nos gusta seguir adelante y por eso hacemos los cambios que creemos necesarios para que la comunidad tenga la tranquilidad de que nadie se aferra a su puesto y que no vinimos a vivir del gobierno y que cada uno tiene la capacidad de hacerlo por sus medios desde la actividad privada. Ven que se realizan obras, se estabiliza el presupuesto y se escucha al vecino y sin embargo van por el camino de intentar de desprestigiar al gobierno. Cada uno hablará cuando sea necesario pero lo más importante es la justicia, dar cuentas del trabajo que hacemos, la parte de la confianza de la gente en uno se construye día a día.

–¿Cómo queda conformado el nuevo gabinete de Salud?
–Tenemos al doctor Eduardo D’Agostino, que nos venía acompañando como director de Atención Primaria de la Salud y que va a ser el nuevo director del hospital con el director adjunto, que es el doctor Walter Ciancio, que es neurólogo y hoy presta servicios en su especialidad en el hospital, un profesional joven y comprometido con la salud local. El doctor Jorge Lucero pasa a ser director de Atención Primaria; se trata de un profesional de una rica vasta.

–Uno de los temas en boga es el de los falsos contribuyentes a la campaña. ¿Cuál es tu visión sobre la problemática?
–Quienes somos parte de este gobierno, estamos conformes con el rumbo que se ha seguido. Tenemos una asignación mensual y resignamos parte de esa asignación para hacer aportes partidarios; se intensifica en el año de campaña ese apoyo que uno da al espacio político que lo contiene. La Justicia tiene todas las presentaciones hechas. El gobierno provincial, a cargo de la gobernadora María Eugenia Vidal, ha encargado a quienes tenían la responsabilidad de tomar registro de los aportes, qué es lo que vemos, donde hay nombres que no deberían aparecer, según dicen. Se está investigando y nosotros estamos igual de preocupados, a la espera de lo que dictamine la Justicia.