Otro intento de usurpación desbaratado

Un intento de usurpación de un terreno se produjo en Av. Central entre Junín y Andes. Ostende, situación que fue impedida pero tuvo ribetes con mucha violencia por parte de quienes intentaron ocupar el espacio que es patrimonio de la municipalidad.

Entre la tarde y noche de ayer, miércoles 7, se produjo un intento de usurpación de un terreno en Ostende perteneciente a la municipalidad y destinado a loteos sociales de viviendas. Lucas Ventoso, secretario de seguridad habló sobre el tema.

-¿Cómo se produce el alerta?
-Un vecino nos advierte de la situación y fuimos directamente a verificar desde la Guardia Urbana junto con el sub secretario de Vivienda y Hábitat, Fernando Ávila. Cuando nosotros llegamos eran las 15.30, evaluamos la situación antes de llamar a la policía…

-¿Y qué actitud tomaron?
-Nos entrevistamos con la gente dejándoles en claro nuestro deseo que depongan su actitud, a lo que ellos nos manifestaron de manera negativa diciendo que se iban a quedar allí. Teniendo como única argumentación que necesitaban un terreno. Había como 5 o 6 personas en el lugar que comenzaban a clavar los postes para hacer las paredes de una vivienda precaria, no obstante encontrarnos nosotros presentes.

-¿Qué actitud tomaron ustedes?
-Ante la situación se llamó a la policía de Ostende, al comisario Pimentel, quien se hizo presente en el momento con personal policial. Por ese entonces ya eran las 16.30 y el personal policial comenzó a hablar con la gente para que depongan su actitud y que de a poco desalojen el terreno y que entreguen todos los elementos que estaban utilizando para hacer esa casilla ilegal en un terreno usurpado. Después de la negociación con la policía de casi una hora la gente depone la actitud, cuando ya tenía la orden de actuar dictada por el fiscal competente. Digamos que no fue necesario pasar a la detención de la gente porque ya habían empezado a desarmar la casilla. Una vez constatada la situación la policía deja un móvil de custodia del lugar para verificar que la gente no vuelva a construir…

-¿Cómo continuó este proceso?
_ A las 18.30 se produce un evento donde el patrullero tiene que salir de urgencia de apoyo a efectivos que estaban ante una emergencia. El patrullero se va y en ese momento, la gente vuelve al terreno pero ya con mayor organización que antes y mayor cantidad de personas y se ponen nuevamente a construir. Cuando el móvil el personal advierte esta situación, volvemos al lugar junto con Fernando Ávila y verificamos que efectivamente la toma estaba más avanzada que lo que habíamos visto en un principio, vemos que la gente ya había vallado el lugar y se estaba escudando en la cantidad de personas que se había introducido en ese terreno privado que corresponde a la propiedad del municipio que a su vez tiene destinado para viviendas de carácter social y que se entregan a las familias luego de cumplir con una serie de requisitos.

-¿Se advertía una mayor cantidad de gente que había ingresado al lugar?
-Sí, era una cantidad mayor que antes, no puedo decir cuántos porque estaban dentro de la casilla pero no había menos de 25 personas. El personal policial vuelve, los invita a deponer esta actitud que en esos momentos era totalmente desafiante y provocativa. La gente dijo que no, que no se iba a ir de ahí. Se vuelve a llamar al fiscal se le comunica la novedad. El fiscal decide seguir adelante por la flagrancia del delito de usurpación. Se convoca a las fuerzas que tienen asiento en Villa Gesell para que brinde su apoyo al procedimiento, se los espera. Cuando llegan antes de intervenir, el personal del servicio local vuelve a hacer una propuesta disuasiva, los ocupantes vuelven a negarse. En ese momento una mujer toma una garrafa y comienza a abrirla estando a unos pocos metros de una fogata y amenaza que si no se va la policía iba a hacer explotar la garrafa con la gente dentro de la casilla. Estaba allí y escucho el ruido de la salida del gas. Fue en ese momento en que la policía se vio obligada a cumplir y terminar con la situación. Reduce a la mujer y le quita la garrafa y entra el personal estático de la policía al lugar y se produce una situación muy compleja, con mucha tensión y violencia porque la gente empieza a pegar patadas, palazos, a arrojar piedras. Tengamos en cuenta que esta gente se escudaba en los chicos que estaban en el grupo.

-¿Se trata de gente que reside en Pinamar?
-No te podría decir. Lo que sí es que todo el servicio local los conocía. Yo no sé cuanto tiempo tienen viviendo en Pinamar pero sí era toda gente conocida por personal del servicio local, de Acción Social, la policía, entre otros…desconozco la antigüedad que tienen en el partido. La cuestión es que fue una situación muy violenta. Hubo varios policías que fueron internados producto de los golpes recibidos, hubo suturas en la cabeza de varios, roturas de móviles policiales, el auto de un policía de Ostende que estaba dando apoyo.

-¿Hubo detenidos?
-Sí. Se llevaron a 5 o 6 personas detenidas por los cargos de usurpación, resistencia a la autoridad, lesiones y daños. A decir verdad la policía obró muy bien, con mucho profesionalismo, al igual que el personal del servicio local y el fiscal Elizarraga que obró de manera ágil. Se trató de una situación muy difícil que terminó cerca de la medianoche. Muchos de los que usurparon tiene otras viviendas querían tomar por la fuerza otro terreno.