En octubre pasado, la Dra. María del Huerto Achidiak, directora del Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur (Inareps), firmó un convenio de cooperación mutua con el intendente de la Municipalidad de Pinamar, Martín Yeza.

El acuerdo tiene por objetivo que los pacientes con discapacidad motriz o visceral de la municipalidad continúen en su etapa de inclusión realizando actividades en el natatorio del Centro de Hidroterapia - Cejupepi. También se ofrecerá capacitación al personal municipal, a cargo del equipo interdisciplinario del instituto, y habrá comunicación constante para consultas sobre la persona con discapacidad.

Poniendo en marcha este proyecto, la Dirección de Discapacidad, ahora conducida por el profesor Hernán Mazzarello, dio el primer paso en la relación con el Inareps.

El funcionario brindó detalles de la reunión que mantuvo con el licenciado Sergio Córdoba, quien está a cargo del Servicio de Recreación y Deportes del Instituto: “Empezamos con la planificación del trabajo conjunto con el instituto. Tenemos un convenio con el Inareps, el ente máximo de rehabilitación a nivel nacional, para capacitar a nuestros profesores, tanto presencial como a distancia, a partir de marzo. Es muy probable que en mayo del próximo año empecemos a rehabilitar en Pinamar. La idea es poder brindar esta capacitación para profesores y profesionales para que trabajen en el Centro de Hidroterapia. De hecho, este proyecto lo inició el doctor Omar Curto, referente del Centro de Jubilados y Pensionados de Pinamar”.

Mazzarello agregó: “Este instituto de rehabilitación es el número uno, tanto motriz como visceral, lo que incluye afecciones cardíacas y respiratorias, especialmente EPOC y casos de amputaciones. Esto es muy importante para nuestro ambiente de trabajo. Es una nueva etapa para Pinamar, es una nueva etapa para el área de Discapacidad y queremos poder brindar un espacio de contención desde todos los enfoques posibles”.

Mazzarello entiende que estos conocimientos tienen que ser aplicados de manera dinámica, ya que a partir de este tipo de tratamientos se rehabilitan lesiones o daños cerebrales adquiridos (ACV o traumatismo encefalocraneano) en un 40% y también lesiones medulares y de columna en adultos.

“Pero también trabajan en la rehabilitación de niños con parálisis cerebral o mielomelingocele. Nuestra idea es, a partir de esto, ampliar la base de seguimiento de las personas con discapacidad por parte de la Municipalidad”, agrega.