Registran una sensible merma de delitos vinculados a alquileres por internet

Tras las reiteradas advertencias de no alquilar sin tener pruebas fehacientes un inmueble, parece que la prédica ha dado sus frutos.

El doctor Pablo Bertozzi, titular de la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), señaló que los delitos en torno a estafas con alquileres fraudulentos, formalizados a distancia, han dejado de tener un lugar significativo dentro de las estadísticas delictivas.

“Todas las temporadas anteriores teníamos muchos reclamos de gente que se sentía un poco estafada. Nosotros hacemos la aclaración que no somos una fiscalía. Somos una oficina administrativa que defiende los derechos de los consumidores, siempre y cuando esté configurada una relación de consumo, o sea, que de un lado haya un consumidor y del otro un proveedor. Gracias a Dios este año bajaron muchísimo los reclamos de estas situaciones de posibles estafas. Para que se entienda la diferencia de una publicidad engañosa, que es lo que nosotros tramitamos objetivamente, y lo que sería una estafa. La publicidad engañosa se da cuando un oferente que es un proveedor, que es una persona física o jurídica, ofrece bienes o servicios, hace una oferta indeterminada a consumidores; ejemplo: la famosa publicación que hay en Mercado Libre. Ahí nosotros configuramos una relación de consumo. Muy distinta es la situación cuando hay gente que se encuentra con publicaciones que por determinados puntos que uno va analizando entiende que la publicación no es hecha en forma válida por un oferente válido; ejemplo: se ofrecen departamentos con vista al mar por precios insignificantes al valor de mercado. Son situaciones que casi no se dan porque hemos varias campañas de divulgación”, explica.

El trabajo de Bertozzi y su equipo está orientado a crear conciencia de que en Pinamar hay un trabajo profesional, no sólo de su área sino también de la Secretaría de Turismo, que actúa en coordinación con el Colegio de Martilleros, por todo el tema de alquileres de viviendas. Otro tema en el cual se trabaja es en los controles de la hotelería.

“Nosotros este año apuntamos a una campaña de concientización para que la gente antes de concretar una operación por alguna plataforma de internet se comunique con nosotros, ya sea con la OMIC, o con la Secretaría de Turismo, para que confirmen que la oferta esa está respaldada por un operador válido. De esa manera le damos respaldo legal a la operación, porque es muy distinto para una persona que viene a veranear, viene a descansar, a desconectarse un poco: no es lo mismo encontrarse con una estafa, que es un delito penal donde no hay un interlocutor válido en el caso de una diferencia, que encontrarse con un proveedor de bienes y servicios, que es una persona física, pero que si hay alguna diferencia en cuando a la oferta, eso sí configura una oferta válida y es plausible de publicidad engañosa e interviene la OMIC”, amplía.

En lo que va de la temporada no se han registrado denuncias al respecto. El funcionario entiende que esto se debe a que se ha realizado una tarea intensa.

“El trabajo de concientización que hicimos este año fue muy arduo –recalca–. La verdad que denuncias por estafa, que la gente llegue y no se encuentre con el titular o con la vivienda, no hubo. Sí hubo denuncias por publicidad engañosa. Por ejemplo, unas personas vinieron diciendo que habían contratado un chalet para doce personas y que cuando llegan le faltaba la mitad de las cosas de lo que decía la publicación”.

En esos casos el personal interviniente va hasta el lugar y, luego de constatar la maniobra, labra un acta.

“Hay que tener en cuenta que la oferta obliga al oferente y el consumidor está en su derecho de exigir esa oferta como parte del contrato. Estamos tratando de educar a las dos patas: que las ofertas tienen validez, que lo que uno ofrece en un portal es lo que el consumidor ve y es lo que quiere y está bien que lo exija”, concluye.