Los aumentos de precios, las nuevas medidas económicas y el factor climático hacen que los eventos se confirmen a último momento. Buena expectativa para el fin de semana de Carnaval. Mar del Plata, Cariló y Pinamar, a la cabeza.
Por Juan Ignacio Erreca
El verano, con sus largos meses y la posibilidad de vivirlos junto al sol y la arena, se ha convertido, desde hace muchos años ya, en una vidriera excepcional para que las marcas más representativas del mercado elijan algunos balnearios de la Costa Atlántica como vidriera de sus lanzamientos y novedades.
Además, esta temporada es, en muchas ocasiones, la elegida por parejas que festejan su casamiento o los que desean celebrar algún aniversario propio o compartido especial, al aire libre o, como se dice en el sector, “outdoor”.
Consultado sobre la demanda de este año, Leandro Canicoba, representante en Mar del Plata de Tentickle, empresa de alquiler y venta de carpas beduinas para eventos, resaltó que durante el mes de diciembre se armaron más de 3000 metros cuadrados de carpas beduinas.
De esa superficie, la mayor parte fue destinada a casamientos, mientras que un porcentaje menor lo ocuparon las fiestas empresariales de fin de año.
Entre las localidades de la Costa, las que mostraron mayor demanda, de acuerdo al ejecutivo, fueron Mar del Plata, Cariló y Pinamar, mientras que en la lista le siguen Mar de Ajó, Necochea y Balcarce.
“Respecto a la temporada anterior, la demanda se mantuvo, pero se focalizaron mucho en los eventos de diciembre. Noviembre fue un mes relativamente tranquilo, mientras en el último mes del año estuvimos trabajando de lunes a lunes”, resaltó Canicoba.
Menos eventos y apuesta al Carnaval
En cuanto a lo que se espera para este enero que recién comienza y la temporada fuerte del verano, todavía no existen certezas. Si bien hay muchas consultas, todavía existen pocos eventos confirmados, que seguramente se vayan concretando más cerca de las fechas.
“Los aumentos de precios que tuvimos en los últimos días desalentaron a mucha gente. Acciones grandes de marcas que se hacían en la Costa, ahora están pensando en llevarlas a cabo de manera más reducida”, explicó el representante de Tentickle.
Por otro lado, se estipula que el comienzo de las clases –en especial de primaria- va a ser a mediados de febrero, por lo cual se reducirá un poco, posiblemente, la extensión de la temporada.
Sin embargo, Canicoba enfatizó que “hay muy buenas expectativas” de cara al fin de semana largo de carnaval, que se realizará del 10 al 13 de febrero, y esperan que los eventos se vayan confirmando en los próximos días.
Encuentros más relajados
Más allá de la cantidad de eventos y carpas contratadas, el formato de los encuentros presenta algunos cambios. En ese sentido, Canicoba explicó que los clientes ya no se inclinan por la fiesta tradicional, que incluía la pista de baile y las mesas redondas para todos los invitados, sino que optan por un estilo más descontracturado.
“Prefieren cocktails con algunos livings, donde la gente está más de pie. También se apuesta mucho a interactuar entre el interior de la carpa y el aire libre”, señaló.
Ganadores de la lluvia
Más allá de lo que ocurre en la Costa, el clima de diciembre impulsó fuertemente la demanda de este tipo de servicios para eventos outdoor. De hecho, por las lluvias, en el país crecieron un 20% las contrataciones de carpas durante diciembre.
En general, de acuerdo a Pablo Goldstein, fundador de Tentickle Argentina, contrataron una semana antes: en algunos casos se alquilaron carpas que no tenían previstas de antemano, por la probabilidad de precipitaciones, y en otros los llamados obedecieron a la necesidad de ampliar los metros cubiertos que ya tenían previstos.
Las perspectivas del clima de verano, más fresco y con probabilidad de precipitaciones mayores que en años anteriores, posiblemente hagan que muchos de esos eventos que todavía no se confirmaron finalmente se realicen. Aunque, como en otras industrias, va a depender también de la evolución de la economía y la incidencia de las nuevas medidas.