Por Pablo Junquera, Director de la Lic. En Diseño de la Imagen Visual Sede Costa en UADE
Si alguna vez soñaste con abrir tu propio restaurante, seguramente hayas soñado también con estar al mando del proyecto y ser el curador de una exclusiva propuesta de arte culinario. Pensaste entonces que, para seducir los paladares más exigentes, es indispensable contar con un maestro de la cocina que le dé vida a cada plato y los convierta en obras de arte gastronómicas. Esto parecería ser un gran comienzo para encarar el proyecto, pero ¿sabemos realmente si es suficiente para alcanzar el éxito de nuestro negocio?
En simultáneo con la propuesta gastronómica, es necesario tener en cuenta una serie de factores que nos ayuden a alcanzar el éxito deseado. El diseño, en su más amplio sentido, es el perfecto aliado para cumplir nuestro cometido. Un menú exclusivo y un sistema de identidad, acompañado de una buena estrategia de comunicación, son los ingredientes necesarios para la construcción de un concepto de restaurante que se diferencie de la competencia y logre atraer a un público específico. Una buena estrategia de diseño 360 es indispensable para crear una imagen profesional y coherente, que refleje la esencia del restaurante y la de su propuesta gastronómica.
El diseño de identidad de un restaurante es el vestido que enfunda su alma. Juega un papel preponderante en la creación de una experiencia gastronómica única y completa. Requiere de un cuidadoso esfuerzo en el arte de proyectar sensaciones. Desde el momento en que los ojos se posan en nuestros signos, hasta el último bocado en la mesa, el diseño debe ser una sinfonía de elementos que conviven bajo una idea rectora. Gastronomía, arquitectura, gráfica, multimedia, interiorismo, indumentaria, todos deben bailar al ritmo de la misma canción. Sabores, colores, texturas, iluminación, sonidos, incluso aromas y emplatado, se combinan para crear un ambiente que invita a repetir la experiencia una y otra vez. Un entramado de estímulos que interactúan con los sentidos de los comensales.
El éxito del proyecto dependerá de la correcta implementación de una estrategia holística, que contemple todos los aspectos inherentes del negocio y tenga como cometido satisfacer todas las expectativas de nuestros clientes.
Por tales motivos considero que, el diseño de identidad de marca de un restaurante, entendiendo marca como un todo, es un aliado esencial para crear una imagen profesional y coherente, que ayude a diferenciar el negocio de la competencia.
La identidad de un restaurante es un espejo de su alma culinaria. Un reflejo de sus valores y de su propuesta gastronómica.
Un distinguido menú de calidad y una imagen profesional y coherente son la clave para conquistar corazones.