La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada N° 5 de Pinamar pidió la elevación a juicio de los tres acusados de ingresar por la fuerza e intentar tomar posesión de dos casas en la ciudad a mediados de 2020. La justicia decidió dar por cerrada la investigación y, como alternativa, se plantea la opción de juicio abreviado.

Las advertencias habían sido motorizadas por los propios vecinos, quienes observaron movimientos extraños en propiedades que habitualmente estaban cerradas. Entre abril y junio de ese año se confirmó que había presencia de ajenos en las viviendas ubicadas en Del Tuyú 295 y De los Langostinos 997.

Tras varias inspecciones se determinó que en las dos propiedades había operarios realizando obras encargadas por terceros que no eran los titulares originales e intentaban justificar la posesión con documentación irregular.

El primer hecho transcurrió cuando se cumplía el primer mes de vigencia de las medidas que impedían movilizarse por el país debido a restricciones sanitarias vinculadas a la prevención de contagios de coronavirus.

Por su lado, la ocupación del inmueble en De los Langostinos 997 se registró en junio de ese mismo año, donde los acusados actuaron “mediante clandestinidad y violencia”, ya que cambiaron la cerradura, ordenaron obras de mantenimiento y se los acusó, además, de haber robado desde vajilla hasta una bomba de agua.

En las últimas horas, la justicia logró reunir la documentación y los testimonios para considerar que el operador inmobiliario local Lucas García Córdoba, Ariel Saverio Lubitz y Aldo Cantone son responsables de usurpación de inmueble, los dos primeros con el agregado de una acusación por robo de bienes que estaba en el interior.