Femeba lo hizo

La entidad fue la responsable de un logro que afianza el accionar del Círculo Médico local. Ahora en sus instalaciones, los proyectos parecen tomar otro impulso y la unión de los profesionales se fortalece.

Fue un encuentro de colegas, de antiguos camaradas o de amigos que hace mucho no se ven. Lo cierto es que el sábado pasado los profesionales nucleados bajo el Círculo Médico pinamarense festejaron contar con una nueva casa, dejar de alquilar y poder reunirse en un espacio más amplio.

Uno de los médicos de mayor reconocimiento en nuestra comunidad, el doctor Ricardo Cap, se refirió al tema: “Hemos concretado un viejo anhelo, que es tener la sede propia con las capacidades para que el público pueda sentirse más cómodo y además que los médicos tengamos a partir de ahora un espacio, no sólo administrativo, sino para formarnos, para recibir visitas, para ser mejores médicos y para la familia de todos nosotros porque contamos con un pequeño espacio para que todos nos podamos encontrar más cómodos. Nos acompañan las autoridades de la Federación Médica de la Provincia de Buenos Aires (Femeba), que han hecho posible este evento y esta adquisición. Quien me acompaña es el doctor Roberto Dávila, que es el presidente de la 9ª Circunscripción y secretario de la federación, un viejo amigo de los médicos de Pinamar que acompañó en todo el proceso de la nueva etapa que se inicia con la presidencia de Pepe Olaechea, la segunda etapa del Círculo Médico de la Asociación Médica de Pinamar… La gente no sabe qué es todo esto. Nosotros hacemos posible que funcione la salud privada, este nexo fundamental coordinado con el hospital y con todos los efectores y los médicos. En nuestras instalaciones el médico hace todos los trámites, ante el colegio o la caja y lo inherente básicamente a la función del médico como prestador de servicio”.

Luego de escuchar atentamente las palabras de Cap, el doctor Dávila señaló: “Siempre ha sido un viejo anhelo de quienes integramos la región que va desde Chascomús a San Cayetano. Somos 16 círculos médicos que formamos parte, junto a otros cien, de la Femeba. En todo el territorio bonaerense, en cada municipio, hay un círculo médico; uno de los muy pocos que no tenía sede propia era Pinamar. Por una cuestión obvia de costos, de realidades, es muy difícil adquirir un espacio físico en una localidad que tiene los costos reales que significa tener algo aquí. Ésta es la casa del médico, es una casa administrativa médico-gremial. Los médicos abarcamos un espacio de atención en la salud en lo público, en lo privado, en el consultorio. El médico se recibe y muere siendo médico, atendiendo a la comunidad indistintamente en donde esté. Este espacio físico va a desarrollar tareas educativas de salud para la comunidad; ustedes lo van a ver cuando desde la Femeba vengan los cursos y las jornadas de RCP. Una cosa es la salud y otra cosa es la enfermedad. La salud está en la calle, en los clubes, en los barrios, en las escuelas; tenemos que tratar de que se mantenga allí, que no llegue al hospital; cuando llega al hospital ya llega la enfermedad, que es donde actuamos nosotros. Lo que hay que hacer es la medicina preventiva para que la gente no llegue a estar enferma, que la gente preserve su salud; es por eso que en el mundo de hoy ha crecido tanto la expectativa de vida. La Argentina, por características culturales respecto a la ingesta y al crecimiento que tiene y a la promoción y prevención de la salud, tiene un promedio de vida que está en los 76 años de edad: es mucho para el mundo moderno y sigue creciendo. Esto se logra con el trabajo mancomunado de toda la sociedad y siguiendo las pautas en salud que ponen el Estado y los médicos que ayudamos a eso”.

El doctor Patricio Echeverría, presidente del Círculo Médico, hizo uso de la palabra: “Quería agradecer a todas las personas que estuvieron trabajando con nosotros, a las comisiones y a todo el personal que hizo posible todo esto. También quiero agradecer a las gestiones anteriores que estuvieron gestionando para que esto sea posible, porque esto comenzó con varias gestiones anteriores… agradecer también a Femeba y a sus autoridades, que nos han acompañado”.

Echeverría hizo extensivo su agradecimiento a otras personalidades presentes y destacó la gestión del doctor Dávila, quien había gestionado gran parte de la operatoria, culminada con éxito. Luego, Echeverría destacó que la nueva casa no sólo beneficia a los médicos sino también al público, que podrá realizar sus trámites con las obras sociales.

Luego fue el turno del vicepresidente de Femeba, Liberto Castela, quien con breves palabras y una lúcida metáfora puso en valor el hecho de contar con casa propia. “Vengo a traerles el mensaje de la Mesa Ejecutiva de femeba, porque realmente hoy es un día de mucha alegría para la federación. Ustedes creen que solamente es para ustedes la alegría y no, para nosotros sí, porque vemos que un hijo más tiene su casa y cuando uno tiene la casa sabe que puede hacer otras cosas y que la familia la va a tener reunida, no solamente tenerla reunida sino que van a poder traer a otros colegas. No sólo (como ya dijeron) a los médicos del sector privado, sino a aquellos que trabajan en el sistema de salud. Así que felicitaciones y aprovéchenla de la mejor manera y que tengan mucha suerte”, dijo el alto directivo.

Acto seguido, los doctores Miguel Cabral y Dávila descubrieron la placa de la casa para posibilitar el acceso a la sede tras deshacer el moño de cintas argentinas, tal cual se acostumbra.