Fratelli tutti, la encíclica de que “nadie se salva solo”

Enviado por el equipo de comunicación de la parroquia Ntra. Sra. de la Paz.

La celebración de Nuestra Señora de la Paz, patrona de nuestra parroquia, cae en el pico de la temporada alta turística, el 24 de enero, y para que toda la comunidad de Pinamar pudiera disfrutar de los festejos, fue corrida al domingo siguiente del 8 de setiembre, en pleno invierno, por coincidir con la conmemoración del Santísimo Nombre de María, instituida con el objeto de que los fieles encomienden a Dios, a través de la intercesión de la Santa Madre, las necesidades de la iglesia, le den gracias por su omnipotente protección y sus innumerables beneficios, en especial los que reciben por las gracias y la mediación de la Virgen María.

La cuarentena impuesta por la pandemia del coronavirus impidió este año programar eventos públicos locales para tributar homenaje a la advocación local de María con que fuera bautizada la parroquia pinamarense desde su origen.

Pero como el distanciamiento social no comprende la religiosidad ni la fe, la colecta “Más por Menos”, que se llevará a cabo el domingo próximo, aunque haya limitaciones en las misas y encuentros de personas, brindará una nueva oportunidad de ayudar con donaciones a las poblaciones más vulnerables.

La fraternidad y la amistad social han cobrado especial vigencia ante el flagelo sanitario que se instaló con llamativa virulencia en todo el planeta durante 2020.

El papa Francisco le ha dedicado a este especial momento la tercera encíclica en lo que va de su pontificado, titulada, precisamente, Fratelli tutti (Hermanos todos).

Las anteriores habían sido Lumen Fidei (La Luz de la Fe), escrita a cuatro manos con su predecesor, Benedicto XVI, papa emérito (2013); y Laudato Sí, sobre el cuidado de la casa común (2015).

La firmará después de la Misa celebrada en la Basílica Franciscana, el 3 de octubre, en la ciudad del Poverello, siendo la segunda ocasión en que el Santo Padre firmará un documento magisterial fuera del Vaticano después de la firma de la Exhortación Apostólica Postsinodal Christus vivit en Loreto el 25 de marzo de 2019.

En Hermanos todos, el Papa reflexionó mucho más profundamente desde la perspectiva cristiana sobre la pandemia, pero en el marco de grandes conflictos sociales en todo el planeta, reiterando lo dicho en varias ocasiones: “Nadie se salva solo”.

El título y las primeras palabras de la nueva carta encíclica pertenecen a San Francisco de Asís, como Laudato Sí (Alabado Seas).

Vatican News destaca que el título del último documento se refiere a un valor central del Magisterio de Francisco, que en la noche de su elección, el 13 de marzo de 2013, se presenta al mundo con la palabra “hermanos”.

“Y hermanos son los invisibles que abraza en Lampedusa, los inmigrantes, en su primera salida del Pontificado. Shimon Peres y Abu Mazen que dan la mano al Papa en 2014 son también un ejemplo de esa fraternidad que tiene como objetivo la paz”.

Hasta la Declaración de Abu Dhabi del año pasado: también en este caso ve la luz un documento sobre la “hermandad humana” que, según Francisco, “nace de la fe en Dios que es Padre de todos y Padre de la paz”.