El niño pinamarense que recibió el apoyo de los vecinos para costear la intervención que le permitirá mejorar su calidad de vida ya se encuentra recuperándose en su casa.
"El problema principal de Indio es que la parálisis cerebral lo que le hace es mandarle la orden a sus piernitas que estén todo el tiempo rígidas. Esta cirugía le va a permitir que relaje los músculos y que pueda apoyar el talón y así tener la estabilidad necesaria para para poder caminar", explicó su mamá, Constanza Basaldúa.
Luego de la intervención en la que le hicieron 56 correcciones, pequeños cortes musculares que hace el cirujano, más que nada en las piernas y en los dedos de los pies, el niño de 7 años acompañado por sus padres regresó a Pinamar.
“El primer día fue complicado porque había dolor, pero con esta intervención tenemos claro que van a venir buenos cambios. Al tercer día de la operación ya estaba mejor y ya volvió a la escuela”, contó su mamá.
“Indio tiene yeso en los dos pies, y estamos adaptándonos, cada tanto se aburre por estar acostado o sentado todo el tiempo. El médico nos dijo que esta etapa es de recuperación de heridas y cada nene se va recuperando a su tiempo y va de a poquito la rehabilitación”, indicó.
Con la ayuda de la ciudadanía juntaron fondos para que Indio pueda realizarse la operación en México y así mejore su calidad de vida y pueda caminar y correr. “Agradecemos a la comunidad de Pinamar, fue todo muy rápido, en un mes pudimos juntar el dinero y hacer la cirugía. Queda el trabajo de rehabilitación y los grandes cambios que se vienen, como va creciendo él y su autonomía”, explicó el padre, Juan Ignacio Sáenz.