El aprovechamiento de nuestros recursos y un cambio de actitud, junto a la política que al respecto se está implementando, hacen que el camino hacia el cambio no se visualice tan intrincado.

–¿Existe en la actualidad un acercamiento entre el turismo y la naturaleza?
–Sí. Decimos permanentemente que la actividad turística está en constante transformación y que, hoy, los cambios son una nueva oportunidad para su desarrollo y crecimiento. En la Argentina estamos acostumbrados a esos cambios, y puede ser que esta vez tengamos una nueva oportunidad para que la moda se transforme en un diferencial permanente a partir del desarrollo de la producción de naturaleza.

–¿Cómo se materializa en nuestro caso?
–Sí, en la Argentina de hoy, la naturaleza está de moda, y no sólo en la Argentina, sino en el mundo, ya que los recursos naturales son altamente considerados. Además de esta tendencia creciente de valoración de la naturaleza, la Argentina está ejecutando políticas públicas concretas asociadas a la creación de parques nacionales, junto a programas de desarrollo turístico que propician la conservación. Esto se complementa con la apertura de nuevas rutas aéreas y la llegada al país de nuevas compañías aéreas; y esta llegada viene acompañada por la mejora de los aeropuertos, autopistas, modernización de la tecnología de comunicación y navegación, con una inversión estatal muy importante.

–¿Cómo se logra el cambio en los prestadores, en la actitud del potencial anfitrión?
–La implementación de nuevos modelos de gestión integrada en el territorio permite que los diferentes componentes que conforman un destino puedan conocer el recurso natural que poseen, valorarlo, para luego promocionarlo, posicionarlo, y, partir de este posicionamiento, diferenciarse para comercializarlo entre las nuevas audiencias que hoy esperan experimentar la naturaleza como requisito indispensable para disfrutar de un buen viaje; audiencias que están dispuestas a darse un gusto y buscan esas nuevas experiencias, ya que esas experiencias poseen un valor emocional muy superior, porque el recuerdo del viaje es para toda la vida.

El incentivo de emprendedores, sumado al proceso de recapacitación de prestadores, permite la transferencia de conocimientos que implica la velocidad en los ciclos de cambio actuales; estos son requisitos indispensables para que la moda no sea pasajera.

–En una misma línea que nuestra pregunta anterior ¿cómo se logra que hay beneficiarios indirectos de la actividad turística?
–En línea con lo que se presentó en la World Travel & Trade Council (WTTC) en abril pasado en Buenos Aires, donde los líderes de la actividad turística del mundo concluyeron que la industria turística realiza un aporte concreto a la creación de empleo, ya que en los últimos cinco años uno de cada cinco empleos nuevos fue creado por la industria del turismo.

En la Argentina el desarrollo del turismo activo y ecoturismo permitirá no solo una mejora en las economías locales al capitalizar la moda junto al impulso que se le está dando a la producción de naturaleza.

–¿Este concepto se refuerza con algún tipo de monitoreo?
–En los relevamientos realizados con motivo de Argentina Natural en 22 localidades y entre más de 1230 prestadores, el impacto es muy importante porque permite no sólo la creación de empleos genuinos, sino que posibilita la transformación de empleados públicos en emprendedores turísticos, especialmente entre los más jóvenes. De acuerdo a los resultados de esos relevamientos se puede observar que la mayoría posee entre buenas y muy buenas expectativas de crecimiento de su actividad para la próxima temporada. La expectativa entre buena y muy buena es de 60% de los prestadores.

Además, si analizamos los resultados del Estudio de Impacto Económico Parcial realizado en el primer semestre del corriente año por Aaetav, es evidente el impacto económico que generan las actividades en la naturaleza en los destinos.

–¿Estamos ante una moda o se trata de una transformación definitiva?
–El crecimiento del turismo activo natural va a representar más de 2.500 millones de dólares de ingresos extra en la balanza turística del próximo año al analizar que el crecimiento de actividades disponibles impactará en la estadía promedio del año pasado y aumentará el gasto promedio de los mercados del exterior, que son los principales demandantes de estas experiencias.

El trabajo colaborativo del sector público y el privado para fortalecer la creación de ecosistemas a partir de la naturaleza provocará un impacto colectivo que significa que la moda vino para quedarse.