Enviado por el equipo de comunicación de la parroquia Ntra. Sra. de la Paz
El párroco de Villa Gesell, Pablo Bosisio, brinda este viernes a las 19.30 en La Paz una charla preparatoria de la Misión Diocesana que se llevará a cabo en septiembre en nuestra diócesis, con el lema “Vos sos mi hijo amado”.
Continúa con los lineamientos de la anunciada la semana pasada en el salón de la capilla de San José, de la que dimos cuenta en la edición anterior.
El último hecho más relevante en la Iglesia Católica a nivel nacional fue la designación papal del obispo de La Plata, Víctor “Tucho” Fernández, de 60 años, como nuevo prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, con sede en el Vaticano.
Se trata del segundo “ministerio” más importante de la curia romana, después del Dicasterio para la Evangelización, llamado antiguamente “Santo Oficio”, que además de las cuestiones doctrinales se ocupa del delicado tema de los abusos.
Monseñor Fernández, quien estuvo en los últimos días en Roma y con el Papa, reemplazará a mediados de septiembre al cardenal español jesuita Luis Ladaria, de 79 años.
El obispo Gabriel Mestre le expresó su “personal y cálido saludo en nombre de toda la diócesis por el nombramiento y la nueva misión que el papa Francisco le encomienda”.
Subrayó: “Permanecemos en oración por su nuevo desafío en la certeza de que su entrega y dedicación nos hará profundizar nuestra fe y compromiso con Dios y la Iglesia al servicio del mundo”.
Otro sacerdote compatriota, Gustavo Agin SCJ, tendrá la distinción de dirigir por otros seis años la congregación del Sagrado Corazón de Jesús de Betharram, según lo decidieron este 20 de junio los delegados reunidos en el capítulo general, realizado del 9 al 29 de junio en Chiang Mai, Tailandia, con el lema “¡Abrete, levántate, caminemos juntos!”.
Los delegados reunidos en la sala capitular invocaron el Espíritu Santo con el canto del Veni Creator Spiritus. Posteriormente, se procedió a la elección del superior general.
Según la tradición, el religioso más longevo le hace la pregunta al recién electo superior general (esta vez le tocó al padre Pietro Felet SCJ), quien con estas palabras se dirigió al padre Agin: “Reverendo padre Gustavo, el capítulo general te eligió para el servicio de superior general, ¿aceptas esta elección?”. El padre Gustavo aceptó la voluntad expresada por la asamblea capitular y la elección resultó entonces efectiva.
El reelecto superior general inmediatamente realizó el gesto de lavarle los pies a doce representantes religiosos de todas las regiones y de todos los vicariatos de la congregación, según lo previsto por el ceremonial de la elección.