López Rosetti cerró el primer mes de charlas

El autor presentó Emoción y Sentimientos en el ciclo de escritores que se desarrolla en la costa atlántica. La claridad de su exposición volvió a ser clave en un tema que despertó sumo interés a una nutrida concurrencia que participó del encuentro, en la noche del martes pasado.

Con el objetivo de acercar a los escritores al lector, el Grupo Planeta y el Banco Hipotecario promueven la vigésima segunda temporada ininterrumpida del ciclo Verano Planeta en Mar del Plata y Pinamar, y la tercera edición en el Museo de Arte Contemporáneo (Mar), durante los jueves de febrero.

Luego de las tres charlas multitudinarias que brindaron Felipe Pigna, Darío Z y Gabriel Rolón, Verano Planeta 2019 recibió esta semana a Daniel López Rosetti, que presentó Emoción y Sentimientos.

El enfoque sensible y multidisciplinario de Daniel López Rosetti nos devuelve a las grandes preguntas existenciales. En la era de Google, parece que cualquier duda puede ser respondida a golpe de clic y que el interés por esos interrogantes ha menguado.

López Rosetti nos vuelve a despertar el apetito intelectual con un tratado lleno de respuestas didácticas y asombrosas, que coloca a Darwin y su psicología emocional de la evolución como una suerte de padre de Sigmund Freud, y que echa mano de Osiris, Séneca y Shakespeare para dilucidar la intimidad del teatro humano. Por ese camino, descifra la sonrisa más enigmática de la historia de la pintura y explica cómo la demencia influyó positivamente sobre Ravel para componer su legendario Bolero.

El autor califica la emoción como algo ancestral y automático, y define el sentimiento como un sistema procesado, con sus múltiples manifestaciones: amor, odio, fe, culpa, vergüenza, envidia y celos. Y pone el dedo en la llaga cuando habla de analfabetismo emocional. Nos han enseñado múltiples materias en el colegio, desde física y aritmética hasta geografía. Pero nadie nos enseñó esa gran asignatura pendiente: la detección y el manejo de las emociones.

En lo que respecta al amor romántico y pasional, López Rosetti es particularmente lúcido, y capaz de describir por dentro ese maravilloso y aterrador proceso incierto, sanador, alucinógeno, y a veces tóxico y enajenante. Aprendemos, en estas páginas, que tenemos un cerebro moderno y un corazón antiguo. Que no somos seres racionales, sino seres emocionales que razonan.

La presentación en Pinamar no dejó duda alguna en cuanto al poder de convocatoria del autor, que volvió a llenar la sala del Teatro de la Torre, tal cual ocurriera en anteriores presentaciones.

Para el autor, una emoción es una vivencia que tiene rostro. El miedo la ira, la alegría, la tristeza, lo son porque tienen rostro, asegura.

“Un ciego de nacimiento va a poner rostro de alegría o de tristeza cuando sienta alegría o tristeza sin haberla visto nunca porque son parte de un programa biológico. Nuestra madre nos enseñó a reírnos con ella y reírnos cuando ella se ríe, pero reír lo hacemos desde el nacimiento. La emoción básica es parte de un programa biológico aunque no queramos, no está aprehendido. La cara de ira es una expresión que ya nos viene de nacimiento, eso es intenso, se llama emoción. Después aparecen lo que llaman sentimientos, porque emoción y sentimientos no son lo mismo”, afirma.

Las caras que reflejan las emociones básicas, miedo, ira, tristeza, asco, alegría o sorpresa son las mismas en cualquier lugar del mundo. La emoción es intensa, aguda, una brasa caliente, dura poco tiempo y tiene una alta repercusión física.

“Los sentimientos son otra cosa que en la evolución de nuestra especie vienen después; el amor es un sentimiento que no tiene rostro y que puede durar más tiempo que cualquier emoción, a veces toda la vida, igual que el odio, la culpa, la vergüenza, la envidia, la felicidad o el orgullo; son distintas manifestaciones que llamamos sentimientos, son, de algún modo, emociones evolucionadas o mezcla de emociones que nuestro cerebro elaboró en una conducta social más compleja”, amplía.

Por consiguiente para López Rosetti la emoción es lo que vemos a diario expresado en los rostros: alegría, ira, miedo, tristeza, asco, sorpresa, mientras que el sentimiento “es cuando las emociones básicas se mezclan y se resuelven en el cerebro”.

En todas sus obras el profesional busca que se tome conciencia acerca del bienestar psicológico con un lenguaje sencillo y claro para que todos puedan autoconocerse y empezar a manejar un poco más el cerebro y el corazón.

Vale recordar que los ciclos cuentan con el auspicio de la Dirección de Cultura de Pinamar. Las charlas son moderadas por los periodistas Nino Ramella y Martín Kobse.

Las próximas presentaciones serán las siguientes:
05. Hugo Alconada Mon: La Raíz de todos los males
12. Viviana Rivero: Zafiros en la piel
19. Jorge Fernández Díaz: El hombre que se inventó a sí mismo
26. Soledad Barruti: Mala leche